Los ejemplares jóvenes pueden migrar muchos kilómetros río arriba y a los lagos y vivir allí varios años, pero sólo pueden desovar en agua salada. Alrededor del 30% de los ejemplares son zurdos, lo que significa que un ojo migró al lado izquierdo del pez cuando era joven. La especie se distingue de otras platijas por tener hileras de nódulos óseos puntiagudos a lo largo de la línea lateral y en la cubierta de las branquias.